Mateo Pérez Martínez
No quiero jugar un lunes. Parece que las productoras
televisivas han tomado el fútbol de la liga. A diferencia del modelo inglés, en donde los horarios televisivos se fijan a principio de temporada, la LFP ha dejado vía libre a los millones de Sogecable, principal productora en nuestra liga. Jugar un lunes, es hacerlo en un día de trabajo. El comercio abre, las tertulias radiofónicas inician sus debates semanales y sobre todo, todas las crónicas deportivas ya están redactadas. Bueno, no todas. Desde febrero, Audiovisual Sport ha decidido imponer su ley y los lunes se deberá jugar al menos un partido de Primera División. Una medida algo impopular que abate por completo al factor más importante en el deporte, el sentimiento. Además muchos socios y aficionados no puedan acudir al estadio por la condición de lunes. Otra piedra más al que paga su abono anual. En definitiva, intentan manejar el mundo futbolístico abarcando incluso al mercado chino que al parecer demanda nuestra liga. “Es algo que se tenían que replantear”. Caparrós lo dejó claro la pasada semana. Ir a San Mamés un lunes ya no es lo mismo. En el descanso no hace falta mirar el video marcador. Ya conozco los resultados de la jornada.
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