Y luego hablan de educación...

Romina Cabeza Izquierdo

Aprovecharé esta queja para hablar de lo que me ha pasado hace unos días. Además, en este blog ya ha habido algún comentario respecto al tema del que voy hablar a continuación.
Hace unos días, exactamente el lunes, me encontraba en el centro y para volver a casa decidí coger el autobús, algo que no fue buena idea. Todo muy normal, hasta que llega a una parada en la que todos los asientos ya están ocupados y entra una pareja de abuelos, la verdad que él no se en que lugar se colocó, pero ella se puso a mi lado con una mirada de “oye maja déjame sentar”. Por educación me levanté y sin decir nada la mujer, casi me atropella para coger mi sitio, y cuando digo sin decir nada es que ni siquiera me dijo “gracias”. Luego somos los jóvenes los que no tenemos educación, anda ya. Sólo sé que para la próxima vez como si se quieren poner tres abuelas a mí alrededor, porque me pensaré mucho el ceder mi sitio. Además de este hecho, quería resaltar que el olor que había en el ambiente no era precisamente bueno, no sé si es que no se hace un uso correcto de la ducha, pero en fin…Eso me toco vivir en un “agradable” y menos mal que pequeño trayecto en autobús.