lunes, 24 de mayo de 2010

Una cornada vs una muerte

Ander González

Este fin de semana he podido observar como Julio Aparicio se llevaba una cornada de un toro que le ha atravesado la boca "con entrada por región cervical anterior y penetración en cavidad oral, produciendo fractura en maxilar superior". Tras este accidente, el torero está ingresado pero estable. Es cierto que el accidente es grave, pero más grave es el asesinato a un animal por el mero hecho de ser una cultura. No entiendo como un asesinato puede ser un espectáculo para una parte del estado español. Si no hubiese este tipo de bochornosos eventos, ni habría accidentes de este tipo ni habría asesinatos a animales sin motivo.

En todos los periódicos, nos hemos encontrado portadas con la espeluznante imagen que, a pesar de no estar en contra, me parece sorprendente el sensacionalismo de los periodicos de este estado. Por tanto, la reflexión que debemos sacar de este incidente es la siguiente: ¿un accidente de este tipo es un espectáculo para que salga en portadas? y una conclusión para finalizar: el toro está muerto, el torero no.

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